Viernes 27 de Noviembre de 2015
El Mostrador
Más allá de la discusión retórica sobre donar o no donar, el empresariado –que se ha unido tradicionalmente a la cruzada– llega con varios puntos en contra. Desligitimado y deteriorado. No solamente por las colusiones sino además por los coletazos de las platas políticas investigadas por el Ministerio Público.
Tres meses después de las últimas 27 horas de amor del 2014, el juez Juan Manuel Escobar decretó prisión preventiva para los controladores del grupo Penta, Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano, este último, ex presidente del directorio de Teletón y que dejó su cargo en septiembre de 2014. Los empresarios están en el vórtice del huracán.
Para el sociólogo Alberto Mayol es muy diferente la situación de Teletón este año respecto al pasado. “Los tiempos en que los empresarios eran referentes modelos de la sociedad, donde podían estar contestando el teléfono de las donaciones junto a los profesionales de la televisión, se acabó. Por supuesto, no solo eso se acabó. También ha terminado la era en que las marcas podían obtener altos grados de reputación gracias a su participación en Teletón. Ni las donaciones llaman mucho la atención en sus montos hoy, ni menos se considera un acto de sensibilidad. Que Teletón tenga publicidad que diga que la marca más importante somos nosotros (los ciudadanos), es una señal muy clara de un proceso de desarticulación. La función integrativa e ideológica del evento es indudablemente feble hoy en día”, dice.
El directorio
A la cabeza de la institución están aún ínclitos nombres de empresarios. Como director honorario sigue a la cabeza Mario Kreutzberger. Fuentes de la institución aseguran que es quien mantiene fuerte los lazos con los empresarios durante todo el año, se reúne con ellos en Santiago y en Miami y construye una relación que es vital cuando llega la hora de donar. Son relaciones que Kreutzberger mantiene no solo en su calidad de cara visible de la cruzada, también porque él mismo es empresario.
Cuando Délano dejó su cargo en septiembre pasado, en su reemplazo asumió Humberto Chiang, médico de la Clínica Las Condes –donde posee un mayor número de acciones Inversiones Santa Filomena LTDA, de la familia Solari–. También está, como vicepresidente, Patricio Jottar, economista de la PUC y profesor de esa universidad y la de Los Andes. Es gerente general de empresas CCU, del grupo Luksic.
Tal como lo señalaba un artículo publicado el año pasado, los Luksic auspician el evento también a través del Banco de Chile, que posee la cuenta corriente donde se realizan las donaciones a la fundación. Además, prestan apoyo económico al mundo de la política por medio de Banchile Corredores de Bolsa S.A. y Banchile Administradora General de Fondos. En tanto, el brazo minero de la familia entrega recursos por medio de empresas mineras Esperanza y Los Pelambres, y de su matriz Antofagasta Plc, que en 2013 aportó US $2,3 millones para las elecciones presidenciales y locales, según el reporte anual del 2013.
Alfredo Schönherr, tesorero de Teletón, es director del área salud de Seminarium, y director de FASA, una de las principales cadenas en su rubro en Latinoamérica. El año 2014 tuvo ventas de $942.014 millones, US$1.537 millones; es decir, utilidades muchísimo más altas que el millón de dólares que tuvieron que pagar el año 2009, luego que la FNE investigara “la colusión de las farmacias” o la forma en que los actores predominantes del mercado –incluida FASA– se concertaron en el precio de 222 productos.
En el directorio de Teletón también se cuentan Rodolfo Rosenfeld, socio fundador de Clínica Las Condes, e Ignacio Cueto, gerente general de LAN.
También está en el directorio Lázaro Calderón, gerente general corporativo de empresas Ripley, y Alfredo Moreno, presidente de empresas Penta S.A. También figura Daniel Fernández, subgerente general de Enersis S.A.
“Desde la irrupción del concepto de lucro como abuso que el desgaste ha ido en aumento y hoy dicha certeza produce rendimiento de ilegitimidad que es difícil de sobrellevar en la gestión de Teletón. Probablemente, para limpiar la escena, tendrá que ser necesario sacar a todos los empresarios de los puestos clave en Teletón y comenzar una era más ciudadana para la institución. Eso, si quiere adaptarse”, plantea Mayol.
El cientista político de la Universidad Central, Marco Moreno, señala que este año la deslegitimidad del empresariado se sentirá en un aspecto más amplio que solo el directorio. “En especial, los que se han visto involucrados en el financiamiento irregular de la política (Penta y SQM), los que han conseguido defender sus intereses (Corpesca) y lo que han logrado incrementar sus utilidades a través de la colusión (Grupo Matte, Farmacias y Pollos) y los que han apostado por acrecentar su nivel de influencia en la política, como el grupo Luksic. La exposición mediática de los estilos y prácticas utilizados no hace más que confirmar la sospecha de que estos actores –los empresarios– han buscado siempre lavar su imagen a través de esta campaña solidaria fuertemente instalada en el inconsciente colectivo de los chilenos. Se agrega a lo anterior, el estilo anestesiado y mediocre de hacer política, que genera una bajísima credibilidad”, sentencia.
Fuente: www.elmostrador.cl