Martes 8 de Octubre de 2019
Es la primera actividad organizada por el Observatorio de Salud en Masculinidades que se realiza en el marco de la semana de Salud en Masculinidades.
Con una mirada desde la identidad de género y basado en el informe de la La Organización Panamericana de la Salud (OPS), dos expertos en la materia analizaron la salud de los hombres en las Américas y su vinculación con la construcción social de la masculinidad.
La actividad fue organizada por el Instituto de Investigación e Innovación en Salud (I3S) de la Universidad a través de la carrera de Enfermería de la sede y contó con la participación como expositores del Dr. en Salud Mental Comunitaria y consultor de la OPS, Benno de Keijzer y el Coordinador del Observatorio de salud en Masculinidades y encargado de los estudios de Epidemiología y Salud de los Hombres del I3S, Alexis Valenzuela.
Entregando un saludo de bienvenida a los/as asistentes el Director de la carrera de Enfermería y Nutrición y Dietética, Fernando Cortés agradeció la presencia de los expositores así como también valoró esta instancia que permite conocer las investigaciones tanto nacionales e internacionales sobre la salud de los hombres, desde una perspectiva de género.
Dando inicio a las exposiciones el Mg. Alexis Valenzuela entregó datos epidemiológicos sobre los hombres en relación a las mujeres tanto a nivel nacional como regional. Además planteó diversas inquietudes sobre cómo prevalecen en hombres escenarios como la violencia, los accidentes, las conductas temerarias y enfermedades asociadas al consumo de drogas y alcohol.
Entregando una visión más externa sobre cómo afectan las visiones tradicionales acerca de la masculinidad en la salud de los hombres, el Dr. Benno de Keijzer basó su exposición principalmente en el Informe de la OPS, del cual también fue partícipe como investigador. “Vengo trabajando la salud de los hombres como una ventana crítica sobre las consecuencias del patriarcado y de la masculinidad hegemónica en ellos mismos. Esa forma de ser “hombres” afecta evidentemente a las mujeres, pero en la salud vemos a corto, mediano, y largo plazo muy serias consecuencias”.
Parte de los ejemplos planteados por el Dr. de Keijzer es que los hombres a menudo tienen comportamientos restrictivos en materia de salud, es decir, están menos dispuestos a buscar atención médica cuando la necesitan, son más propensos a correr riesgos, a estar más reprimidos emocionalmente y a sufrir enfermedades de trasmisión sexual.
Según destaco Bennan gracias a los estudios de género se pueden entender que muchas de las causas de mortalidad de los hombres no tienen su origen en lo biológico, sino que están relacionadas al proceso de socialización de lo que significa ser hombre. “El mandato que exige la sociedad es ser proveedor, ejercer control, el permiso de violentar como algo que es parte de lo masculino, no mostrar emociones, ser heterosexual y también homofóbico para remarcar su sexualidad. Todo esto va marcando la vida de muchos hombres en infancia y sobre todo en la adolescencia que se va cristalizando y luego en la etapa de adulto se refleja en esa actitud de no cuidarse la salud, lo cual se asocia a las mujeres”.
Finalmente uno de las advertencia dadas por ambos expositores fue le llamado a tomar medidas de promoción y prevención en política de salud para los hombres.