Jueves 29 de Septiembre de 2022
Con una trayectoria laboral que data de 1997, el exalumno centralino comparte los hitos que marcaron el desarrollo de su carrera y como su formación en la UCEN dejó huella a través de las competencias que son parte del sello institucional.
Omar Chamorro, es un egresado de la Universidad Central (UCEN) de la carrera Técnico de Nivel Superior en Construcción, con experiencia como analista de Sistema y de profesión Técnico en Administración de Empresas, actualmente se desempeña como jefe de Postventa de la zona norte en Inmobiliaria Armas Limitada.
Sus inicios se remontan al año 1997, cuando trabajaba en el rubro de la construcción en Inmobiliaria Socovesa, como oficina técnica en una obra. Dos años más tarde se le presentó la oportunidad de ser asistente de Postventa de la misma empresa. Para el año 2008 ya era jefe de Servicio al Cliente y asegura que en la búsqueda de nuevos desafíos renuncia a principios del año 2014 y comienza a trabajar en Inmobiliaria Pacal como profesional de Control y Gestión de Obras, donde trabajó hasta octubre de 2016. Su siguiente desafío laboral fue en Inmobiliaria Armas donde empezó como analista de Control y Gestión para la Gerencia de Desarrollo Inmobiliario. Destaca que “en enero del 2019 me ofrecen ser jefe de Postventa, esto sin tener un título relacionado con el rubro en terreno, lo que me llevó a sentirme comprometido con la empresa y tomar la decisión de estudiar TNS Construcción en Universidad Central”.
Chamorro asegura que “el sello que se presenta más en mi formación es el pensamiento crítico, la toma de decisiones de manera autónoma, en base al análisis crítico de situaciones en mi área, Postventa, es algo que se vive todos los días”. Por otro lado, manifiesta que la comunicación efectiva le ha permitido poder dirigir los equipos en terreno con un buen liderazgo.
Frente a las oportunidades que ofrece la institución a sus estudiantes, el egresado rescata que la UCEN entrega “nuevas herramientas”, destacando desde el apoyo humano recibido por parte del personal docente, hasta las capacidades instaladas, como los laboratorios “disponibles para el aprendizaje” puntualizó.
Finalmente, compartió un mensaje dirigido a las nuevas generaciones: “el intelecto es la característica más hermosa que puede tener un ser humano”, en ese sentido extendió la invitación a que puedan desarrollar “habilidades que les permitan ser la mejor versión de sí mismos/as como profesionales y a la vez ser aporte para el desarrollo de nuestro país”.