El hogar no siempre se configura como un lugar seguro y de protección, ya que en situaciones en que se vive violencia, este espacio, se torna amenazante y riesgoso.
La delicada situación sanitaria en la que nos encontramos producto de la emergencia sanitaria global por el COVID-19, ha significado que varias organizaciones nacionales e internacionales por la igualdad de género, como ONU Mujeres, hicieran un llamado en contra de la violencia de género. Lo anterior, debido a que la cuarentena en la que se encuentran muchos países, implica un factor de riesgo para las mujeres que se ven obligadas a mantenerse en sus hogares y compartir más tiempo con los que muchas veces son sus agresores. Por este motivo, es que la Unidad de Género y Diversidad esta realizando una campaña en redes sociales de la Universidad que apunta a informar sobre este tema.
Cabe recordar que esta crisis ha conllevado un alto número de desempleos y problemas económicos, lo que ha implicado que las personas tengan que reorganizarse y adaptarse a nuevos estilos de vida y de funcionamiento. Sumado a ello ha impactado, generando incertidumbre, caos, sensación de angustia, miedo, entre otros. Todo lo anterior ha aumentado los niveles de frustración y en hombres que ejercen violencia ha impactado en la medida en que dejan de sentir que tienen el control en otras áreas de su vida, sintiéndose insatisfechos, y disconformes, lo que, según la Organización de Naciones Unidas, aumenta la violencia hacia sus parejas.
La proximidad física con la figura que agrede en tiempos de cuarentena es mayor, lo que deriva en que haya mayores estrategias de control, poder y aumente la probabilidad de violencia, así como su frecuencia, cronicidad y gravedad, según lo revelado por la Red Chilena Contra la Violencia. El hogar por lo mismo no siempre se configura como un lugar seguro y de protección, ya que en situaciones en que se vive violencia, este espacio, se torna amenazante y riesgoso.
Por lo mismo la Unidad de Género, que está orientada a erradicar la violencia y a prestar servicios de apoyo a toda la comunidad universitaria, hace un llamado a través de redes sociales, al igual como lo están haciendo otras organizaciones y países, a informar sobre qué hacer ante este escenario. A través de esta campaña busca sensibilizar sobre la violencia de género y orientar sobre las redes de apoyo disponibles, así como también comprender que el aislamiento a propósito de la cuarentena por COVID-19, no significa quedar desconectadas, con esto aludiendo a que es fundamental mantener el contacto con los más cercanos como la familia y amigos.
Un factor protector es generar redes y tratar de vincularse dentro de los medios y alcances de cada una. Por lo mismo recomiendan que si convives con más gente será fundamental compartir, conversar, y considerar a otra persona que pueda ser de ayuda en caso de alguna situación de riesgo, o alertar a un/a vecina u hijo/a de lo que está pasando y sobre cómo proceder. Mantener con alguien un código como señal de alerta es otra de las recomendaciones importantes que se sugiere, así como también siempre disponer de números de teléfono a mano en caso de emergencia, ya que en el momento puede resultar confuso recordarlos.
La idea también de esta campaña es visibilizar que, pese a esta crisis, la Unidad de género y Diversidad se encuentra funcionando de manera no presencial, entregando orientación y apoyo psicológico a toda persona que lo requiera.