Lunes 25 de Noviembre de 2019
De acuerdo a cifras entregadas por la ONU, una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física o sexual, siendo la pareja principalmente quien ejerce este tipo de agresión.
Unidad de Género y Diversidad, Universidad Central.
El día 25 de noviembre se conmemora el "Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer", fecha en la que fueron asesinadas las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal en República Dominicana, por ser opositoras al régimen del dictador Rafael Trujillo.
Desde 1993 la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, considerando que es una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras en el mundo. La ONU define la violencia contra la mujer como:
"Todo acto de violencia que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o sicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada".
De acuerdo a cifras entregadas por la ONU, una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física o sexual, siendo la pareja principalmente quien ejerce este tipo de agresión. Respecto al ámbito de la sexualidad también da cuenta que solo el 52% de las mujeres casadas o que viven en pareja decide libremente sobre las relaciones sexuales, el uso de anticonceptivos y su salud sexual, lo que refleja que existe violencia en una población importante de mujeres en este plano de su vida.
Respecto a la realidad en Chile, una de cada tres mujeres ha sufrido algún tipo de violencia (INE-OCDE, 2015). Durante el 2019 han sido asesinadas 41 mujeres a manos de sus esposos o convivientes, sin embargo, esta cifra oficial del Servicio Nacional sólo considera los femicidios de acuerdo a la ley y no a todas las mujeres que han muerto por violencia de género. Lamentablemente esta realidad abrumante, se suma en el último mes a la violencia que han sufrido mujeres en el contexto de las movilizaciones sociales.
En este sentido, la violencia política sexual emerge como una práctica invisivilizada y sistemática, como una forma de castigar y controlar a las mujeres, por transgredir los mandatos de género, establecidos por la sociedad patriarcal y heteronormativa. Estas conductas siempre deben evitarse, pues son una vulneración a los derechos humanos.
Es por ello que la Unidad de Género y Diversidad hace un llamado permanente a visibilizar, sancionar y legislar para no dejar impunes a los responsables de estos delitos. Debido a esto, el día de hoy conmemoramos a todas aquellas mujeres asesinadas por razones de género y exigimos justicia.
Desde la labor que realizamos, asumimos un compromiso a fin de erradicar este tipo de violencia y ofrecemos, así, orientación y/o apoyo, en el ámbito de nuestras competencias, a toda la comunidad universitaria que se vea afectada por situaciones de esta índole.