Lunes 29 de Septiembre de 2014
Se pretende develar y objetivar la relación sensible de los habitantes con sus espacios públicos, para formular criterios y directrices de diseño, con datos levantados desde la propia comunidad.
Conocer cómo perciben y quieren conservan o mejorar su entorno los habitantes del Barrio Balmaceda, en la comuna de Santiago, es el trabajo que está llevando a cabo en ese sector de la capital, el equipo que lidera la académica de la Escuela de Arquitectura del Paisaje UCEN, Mónica Palma Vergara.
Se trata de uno de los proyectos que se adjudicó fondos en el concurso interno de Vinculación con el Medio de la Universidad Central de Chile (UCEN) en el 2013 y que lleva por nombre "Criterio de diseño de espacio público basados en la sensibilidad local barrio poniente, comuna de Santiago".
La propuesta es apoyada por la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Paisaje y de la Escuela de Arquitectura del Paisaje, en alianza con la Corporación Patrimonio y Paisaje. También ha recibido el patrocinio de la Dirección de Aseo, Ornato y Medio Ambiente, y el apoyo de la Dirección de Desarrollo Comunitario (DIDECO), ambas de la Municipalidad de Santiago, además de la participación de los vecinos del barrio, a través de sus respectivas juntas de vecinos.
El Barrio Balmaceda es uno de los más antiguos del centro de Santiago y está ubicado entre las calles Matucana, San Pablo, Presidente Balmaceda y la Autopista Central. De pasado obrero, ferroviario e industrial, en sus calles se instalaron la ex fábrica Sal Lobos, la fundición de acero SIMA, la Plaza Balmaceda, la Estación Yungay y la iglesia San Juan Bautista, entre otros, como también de algunos conjuntos habitacionales levantados para los trabajadores de la época.
Hoy, pese a la conservación de algunas calles, hay "zonas en franco deterioro, edificios en demolición y emergiendo otros que no tienen que ver con el lugar. Se notan inmediatamente las nuevas intervenciones y está propenso a que lo aplasten las inmobiliarias" enfatiza la docente. Añade que en cuanto a la gente, se han mantenido varias de las familias fundadoras y han llegado muchos emigrantes latinoamericanos.
En este contexto, la iniciativa pretende "develar y objetivar la relación sensible de los habitantes con sus espacios públicos, para formular criterios y directrices de diseño, con datos levantados desde la propia comunidad".
Para ello se están efectuando una ronda de tres talleres, que comenzaron con gran convocatoria vecinal el pasado 12 de septiembre, donde se recogerá la mayor cantidad de datos acerca de cómo la gente percibe y reconoce sensorialmente el lugar que les rodea.
La profesora Mónica Palma explica que en este punto, el aporte y experiencia de la Corporación Patrimonio y Paisaje es la aplicación de su metodología llamada Lenguaje Perceptual del Paisaje. "Se busca descubrir lo que los residentes tienen incorporado en su memoria individual y colectiva respecto al paisaje que habitan. Por ejemplo con qué colores, texturas, líneas, formas, aromas, olores, sonidos, temperatura o hasta con qué ruidos identifican su barrio, tanto de origen natural como construido".
Así, de cada taller se obtendrán los datos clave de identidad del lugar, que pueden servir a futuro si se quiere levantar cualquier propuesta arquitectónica, paisajística o de otra índole. El proyecto permitirá "resguardar, recuperar y proteger el lenguaje sensible entre la gente, su cultura y su territorio, por lo cual se convierte en un patrimonio colectivo", enfatiza Mónica Palma y agrega que como profesionales "diseñamos para los demás, pero no siempre sabemos las claves de identidad o cómo perciben su paisaje los vecinos".
Respecto a los talleres precisa que en el primero se realizó una sensibilización e inducción sobre el tema, mientras que en el segundo se recolectaron la mayor cantidad de datos. En el tercero se mostrarán los resultados sobre la base de una información más elaborada, donde "les presentaremos los resultados y ellos validarán si están de acuerdo. Si hay dudas, se repite el ejercicio", dice la docente.
"Este registro y recogida de datos perceptuales se entregará a la Municipalidad de Santiago, convertido en un documento de criterios de diseño para los espacios públicos del barrio, que permitirá basar los proyectos en características de diseño que identifiquen a los vecinos con su sector. Hay que agregar, que el municipio se encuentra trabajando en mesas barriales para intervenir las plazas, las platabandas, las veredas, las esquinas y los espacios públicos, así como en la puesta en valor de sus patrimonios. La metodología entrega una importante herramienta para los equipos de diseño y pretendemos replicarla en otros barrios", puntualiza.
Hay que destacar que el equipo de trabajo que encabeza la diseñadora paisajista y consultora Mónica Palma, lo integran los académicos de la Escuela de Arquitectura del Paisaje UCEN, Félix Navarro y Francisca Fernández, estudiantes en práctica de la carrera y los miembros de la Corporación Patrimonio y Paisaje, los profesionales del paisaje e integrantes del directorio de esta institución, Mónica Morales y Ricardo Riveros.
Una vez que se realice la validación de los resultados, se entregará el proyecto final con la invitación a un acto de presentación y celebración, a todos los participantes del barrio, de la Universidad Central de Chile y del municipio.
Más información en el Fan Page Percepción Barrio Balmaceda https://www.facebook.com/pages/Percepci%C3%B3n-Barrio-Balmaceda/333832426776411?ref=ts&fref=ts y en la páginas webs de la Escuela de Arquitectura del Paisaje UCEN http://arquitecturadelpaisaje.ucentral.cl/ y de la Corporación Paisaje y Patrimonio http://www.patrimonioypaisaje.cl