Martes 15 de Enero de 2019
A través del proyecto “Fortalecimiento del Producto Turístico Salinero”, en ejecución desde 2018 y que culminará en octubre próximo, el Instituto del Patrimonio Turístico de la FAUP ha estado trabajando, con los beneficiarios de la iniciativa, en distintas estrategias de comercialización y difusión de los productos asociados a la extracción de sal mar en las localidades de Cáhuil, Barrancas y Lo Valdivia.
"Queremos promover la actividad ancestral que desarrollan los salineros, pero además descubrir todos aquellos emprendimientos que se generan en torno a este atractivo turístico, como son los alojamientos, gastronomía, naturaleza, artesanías y deportes, entre otros".
Con estas palabras la profesional del Instituto del Patrimonio Turístico (IPT), Natalia Toledano, se refirió al proyecto "Fortalecimiento del Producto Turístico Salinero", el cual es financiado por el Gobierno Regional de O´Higgins y su Consejo Regional, enmarcado en su Estrategia Regional de Innovación a través del Fondo de Innovación para la Competitividad, y ejecutado por la Universidad Central de Chile, a través del IPT, con el apoyo de Sernatur.
El objetivo es comercializar y difundir la oferta de productos salineros para integrar a emprendedores de la zona a la oferta turística regional, específicamente en las localidades de Cáhuil y Barrancas, en Pichilemu, y Lo Valdivia, en Paredones.
Esta iniciativa es la continuación de la ejecutada en 2014. En aquella oportunidad, se diseñaron productos relacionados con la actividad salinera y otros de tipo local, distintivos de ese territorio. También se identificaron a los prestadores de servicios, se impartieron capacitaciones a los beneficiarios y se desarrolló una imagen de marca territorial.
Tal como relató Natalia Toledano al canal Innova Difusión, en la actual propuesta, cuya ejecución partió en 2018 y finaliza en octubre de este año, hasta la fecha se ha estado trabajando principalmente "en la identificación de brechas en temas de comercialización y difusión, se han impartido talleres que tienen que ver con mejorar las técnicas de ventas y en noviembre pasado, participamos en la feria de turismo VYVA, en Santiago, donde expusimos los productos y la oferta de los servicios turísticos de la zona".
En esta misma línea fue que en diciembre, se apoyó el "Birdwatching Camp", el primer show de aves en Pichilemu y que da cuenta de la biodiversidad particular del ese entorno, sumándose así a la oferta turística ligada a las salinas. Mediante un nutrido programa de tres días, se realizaron actividades enfocadas a la observación de las distintas especies de aves que circulan en el Humedal del Estero Nilahue, en el sector de El Bronce.
Asimismo, se impartió un taller de aves del humedal, que estuvo a cargo de Rodrigo Reyes de Birdwatching Chile. Se trata de 46 especies que permanecen en el lugar, entre las cuales hay algunas migratorias y otras que sólo anidan allí, como el Cisne Coscoroba, el Cisne de Cuello Negro, el Pato Jergón Chico, Jergón Grande, Pato Real, Tagua, Gaviota Cáhuil, Garza Cuca, Sietecolores, Cuervo del pantano, Garza Grande y Garza Chica.
"Lo principal es que en este territorio se encuentran las únicas salinas de mar que hay en el país y además, los salineros han sido declarados Tesoros Humanos Vivos. Por eso nos parece importante, seguir difundiendo y desarrollando productos turísticos ligados a las salinas", puntualiza Natalia Toledano.