Viernes 29 de Enero de 2021
Las internas aseguraron que en cuanto a su proceso de práctica, lograron conocer un diverso mundo desde la Terapia Ocupacional
Las estudiantes de 5º año de la carrera de Terapia Ocupacional de la Universidad Central, quienes estuvieron a cargo de la supervisora la terapeuta ocupacional Belén Quintanilla Monroy, realizaron su último internado en la Casa de Acogida Las Condes, la cual pertenece a la corporación Moviliza.
Cabe destacar que Moviliza es una corporación que surge en el año 2006 con el objeto de prevenir y superar la situación de calle en Chile, promoviendo que quienes se encuentran en situación de calle movilicen sus propias capacidades y desarrollen sus potencialidades para lograr procesos de superación personal
Esta corporación apoya a la integración social de las personas en situación de calle, que para superlo, dependerá de los esfuerzos personales de cada persona, como de las oportunidades que entregamos como sociedad. Es un hecho que, si se actúa a tiempo para alcanzar la inclusión social y el desarrollo humano, se logra evitar que la calle sea una alternativa, asegura el académico de la carrera de Terapia Ocupacional Leonardo Vidal.
Además agregó que "creemos que es de vital importancia informarse en estos temas, los cuales aún son desconocidos. Es necesario reflexionar en cuanto a que es la situación en la calle, ya que no es solo dormir en la calle, sino que involucra múltiples aristas, ya sean familiares, emocionales, laborales, entre muchas otras".
Las estudiantes aseguraron que en cuanto a su proceso de práctica, lograron conocer un diverso mundo desde la Terapia Ocupacional, un ámbito más social, que muchas veces no se logra ver en detalle en lo teórico, sino más bien en la práctica .“La experiencia en este centro de práctica nos muestra un contexto comunitario en el que las dinámicas de crear, conectar, potenciar redes son un aprendizaje increíble en la que se vive en concreto aquello que no se logra visualizar completamente en clases, un espacio en donde aún queda mucho por hacer como terapeutas ocupacionales. Sin embargo, lo que más queda es la vinculación desde lo humano, desde un simple saludo cordial, acompañar en lo cotidiano y sentir que pequeñas acciones se van sumando para mejorar la calidad de vida de alguien; sentir que a ello se devuelve una sonrisa o palabras de aliento, llena el corazón y hace que todo tenga sentido”.
La terapeuta ocupacional Belén Quintanilla refiere que “como supervisora de este proceso considero que el conocer en la praxis como es el trabajo con personas en situación calle, se vuelve una experiencia de descubrimiento de nuevos saberes y de nuevas prácticas de trabajo, que respondan ante nuestra realidad Chilena, que en ocasiones nos muestra en escenario complejo de vivencias y trayectorias de vida, más en contextos de vulnerabilidad social, sobre todo en Terapia ocupacional, carrera emergente en ámbitos sociales, que cada día más, válida su espacio en equipo psicosociales, que en este caso, Geraldine y Javiera, pudieron ser parte de una gran manera, mostrando actitudes reflexivas, proactivas y de gran compromiso con su proceso estudiantil, ya hoy terminado, por lo que se invita a continuar desde aquí su rol como terapeutas ocupacionales siempre en búsqueda y validación de justicia social”.