Lunes 4 de Diciembre de 2017
Un galvano que valora y agradece sus 31 años de servicio recibió el funcionario administrativo Héctor Carlos Díaz García, en el marco de la celebración del 35º Aniversario de la Universidad Central de Chile.
Don Carlos comenzó en el año 1979 y hasta 1981, como asistente en "Mantra", oficina dedicada a la capacitación y perfeccionamiento del personal de empresas del rubro Economía y Mercado donde su Gerente General era don Vicente Kovacevic Poklepovic. Él, junto a don Carlos Blin Arriagada y don Luis Flores Vera, ambos con la experiencia de haber aportado en la creación de la Universidad Gabriela Mistral, don Luis Castañeda quién participó en la creación de la Universidad La República, don Omar Mendoza Palominos, don Pedro Cruzat, don Gonzalo Hernández Uribe, don Enrique Martin Davis y don Hugo Gálvez Gajardo ex ministro de Estado, dieron inicio a este gran proyecto Universidad. En ese privilegiado rol, pudo ser testigo de reuniones y desvelos interminables para impulsar y llegar a feliz término el proyecto soñado y guiado por don Carlos Blin Arriagada.
La idea que sustentaba este proyecto era para que los miles de jóvenes que no podían continuar sus estudios superiores en las universidades tradicionales, debido a lo restringido de vacantes de la época, tuvieran una institución donde formarse como profesionales.
"Mi hermano Hugo Díaz y yo, éramos funcionarios de aquella empresa dirigida por don Vicente. Él siempre nos hacía saber que cuando la Universidad iniciara sus actividades, estábamos considerados en la planta administrativa" relata don Carlos, recordando los inicios de la UCEN. Mientras el proyecto avanzaba y el sueño comenzaba de cero, nuestro histórico Carlos Díaz se traslada a la Región de Coquimbo durante casi dos años, en busca de una oportunidad laboral. En tanto su hermano Hugo se queda en Santiago. Así fue como Hugo Díaz se trasformó en el primer funcionario de la naciente Universidad Central.
Una vez de regreso a Santiago; inmediatamente es contactado por su antiguo jefe, don Vicente Kovacevic por intermedio de su hermano Hugo y desde ahí se integra al nuevo equipo de la casa de estudios. Su historia como funcionario comienza en la que fue la primera Casa Central, ubicada en la calle Carmencita 59 Las Condes, es allí donde se da inicio al primer proceso de admisión para el año académico 1983.
"Ahí estuve cerca de dos años como auxiliar de servicio, después fui enviado a la sede La Reina donde me desempeñé como nochero; al otro día entraba a las nueve de la mañana en Carmencita a petición de don Luis Flores Vera, muchas veces no me alcanzaba el tiempo para irme a la casa, de ahí regresaba a mi turno de noche, la verdad he hecho de todo aquí, pero con agrado.", relata Carlos Díaz.
"En el año 1987 compraron un automóvil para el uso institucional y se me nombró como conductor para el traslado de cuatro de los nueve fundadores de la Universidad, de hecho fui el primer conductor a contrata en la Ucen. Así estuve muchos años, hasta el año 2008 solicité a la autoridad del momento, dejar de cumplir esa función. Por lo que fui trasladado a la Facultad de Comunicaciones", agrega.
El gran aprecio y cariño que los fundadores y directivos más antiguos tienen por don Carlos; se debería según él, a que "siempre tuve mucho respeto, lealtad y admiración. Que en más de una oportunidad les hice saber. Soy un eterno agradecido de la vida y especialmente de la Universidad, al haber conseguido innumerables beneficios propios y familiares. Me ayudaron mucho y bueno, siempre sentí el cariño de los fundadores", acota.
En su mirada visionaria, la Universidad adquiere un terreno en la calle Luis Cousiño N° 1854 en Santiago, para construir ahí la futura Facultad de Derecho por la cercanía que los alumnos tendrían del proyecto del nuevo Palacio de Tribunales, que finalmente terminó siendo el Centro de Justicia. Como el terreno se encontraba en estado de semi abandono, varias veces robaron objetos y cosas desde el interior (medidor de luz, agua y parte del techo de la casa que había al interior) Para evitar nuevas pérdidas, volvieron a habilitar la casa donde don Carlos vivió y cuidé el futuro campus, por casi nueve años.
Carlos Díaz detalla que "finalmente esa propiedad no se construyó, porque se adquirió el primer terreno donde se erigió el primer edificio en lo que es hoy el sector Parque Almagro. Debido a que Bienes Nacionales había enajenado la mayor parte del terreno adyacente al de la Ucen para levantar un proyecto de viviendas sociales, la universidad hizo lo propio iniciando las negociaciones para vender. Antes de vender, don Pedro Cruzat dijo 'estoy de acuerdo en vender pero, tienen que darle una casa a la persona que vive ahí actualmente'. Entonces él hizo las gestiones para que la Universidad me hiciera un préstamo en dinero y así postular al subsidio para la vivienda. A los nueve meses me entregaron mi departamento, que es donde vivo hoy. Entonces ¿Cómo no ser un eterno agradecido de la Universidad?".
Don Carlos y el Juez Garzón
Entre las muchas historias que ha vivido don Carlos en la universidad, hay una que se puede decir que es notable. Siendo conductor de la Honorable Junta Directiva, la Universidad Central recibe la visita del ex juez Baltazar Garzón. El magistrado español conocido en Chile por haber dictado la orden de detención en Londres, del dictador Augusto Pinochet. Garzón vino a dictar una charla magistral y a su vez recibió la distinción Honoris Causa. Durante los días 28 y 29 de agosto de 2006 y de acuerdo a la nutrida agenda del juez español, se contemplaba otra charla magistral a los alumnos de la sede La Serena. Por motivos de seguridad, el magistrado pidió ir por tierra para evitar volar dentro de Chile.
Fue en este viaje que don Carlos encabezó la caravana de ida y regreso trasladando a la escolta del juez, bajo estrictas medidas de seguridad. "Nos fuimos con escolta de carabineros de civil que iban despejando la ruta 5 norte y comunicando a las diferentes comisarías para cerrar todos los cruces y así dar mayor velocidad y rapidez a nuestro viaje y la seguridad antetodo, llegamos a alcanzar los 230 kilómetros por hora y poquito más. Fue tal la rapidez del viaje, que al llegar al ingreso a Coquimbo aún no se encontraban los vehículos policiales que debían escoltarnos al hotel en La Serena, creo que jamás imaginaron la velocidad que desarrollaríamos", describe con humor don Carlos.
Debido a esta tarea especial y de gran responsabilidad, es que don Carlos Díaz recibe una carta de agradecimiento y felicitación de la Honorable Junta Directiva, la que guarda y conserva con mucho cuidado y gran cariño entre sus valiosos recuerdos. Hoy exhibe con orgullo y alegría, el merecido galvano que lo reconoce con 31 años ininterrumpidos que se le entregó en la última ceremonia del 35º Aniversario de la Universidad Central de Chile.
Al consultarle por las emociones que le traen este reconocimiento, señala que "es la primera vez que recibo un premio así. Jamás había pensado en esto. Lo importante para mí, siempre fue y será desempeñar bien mi trabajo, con eficiencia y siempre intentando hacer las cosas fáciles para solucionar y agilizar el funcionamiento en la Facultad".
"Me siento un privilegiado de haber sido invitado por gran parte de los fundadores, a subir a este gran sueño que hoy se ve, ya es una realidad", remata.
El día 11 de Enero de 2018, don Carlos cumplirá 34 años como funcionario activo en la Universidad Central de Chile.