Miércoles 22 de Julio de 2015
El profesor Alfonso Dingemans estuvo en el Reino Unido entre el 18 de enero y el 1 de febrero visitando diversas universidades anglosajonas
Principalmente, el profesor de la cátedra Métodos Cuantitativos, que se imparte solo para los estudiantes de Ciencia Política de quinto semestre, visitó la University College London (UCL) y el Royal Institute of International Affairs, mejor conocido como Chatham House. En este último se entrevistó con académicos de renombre mundial en el área de historia económica latinoamericana, específicamente con el prof. Rory Miller (University of Liverpool-UCL) y el prof. emérito Victor Bulmer-Thomas (University of London).
También asistió a la presentación del libro The Great Depression in Latin America (Duke University Press), editado por Paulo Drinot (UCL) y Alan Knight (University of Oxford), el cual fue comentado por el prof. Rory Miller (UCL) y la prof. emérito Rosemary Thorp (University of Oxford) en las dependencias del Institute for the Americas de la UCL.
Asimismo, concurrió al lanzamiento del Report on the state of UK based research on Latin America and the Caribbean (Informe acerca del estado de la investigación sobre América Latina y el Caribe en el Reino Unido) presentado por el prof. Antonio Kapcia (University of Nottingham) e introducido por la Baronesa Gloria Hooper (presidenta del All-Party Parliamentary British-Latin America Group-Grupo Parlamentario Pluripartidista Británico-Latinoamericano) en The Chancellor’s Hall del Senate House.
El primer objetivo de esta pasantía consistió, principalmente, en que académico pudiera interiorizarse del estado de la historia económica de América Latina en el Reino Unido, específicamente en lo referido al comercio internacional. Ello debido a que es innegable la importancia de las universidades británicas, y de sus numerosos journals asociados a ellas, en la generación de conocimientos acerca de América Latina, tanto en el pasado como en la actualidad. En gran medida, la frontera del conocimiento sobre América Latina sigue siendo desplazada por investigadores asociados a universidades ubicadas en los países más avanzados, más que en América Latina. Cabe señalar que la historia económica sufre –como disciplina– de una indefinición crónica respecto de su relación con la Historia y la Economía y, por tanto, del uso y necesidad de métodos nomotéticos (regularidad) o ideográficos (singularidad) y de una epistemología adecuada.
En segundo lugar, se dedicó a averiguar en qué medida la crisis financiera de 2008 había generado cuestionamientos o discusiones –académicas o sociales– sobre la epistemología asociada al formalismo matemático y los métodos cuantitativos dentro de la enseñanza de la Ciencia Económica.
Los resultados obtenidos a partir de las actividades mencionadas apuntaban a que la historia económica, al menos aquella defendida por los académicos entrevistados, sigue teniendo una relación complicada con la Economía y con el uso de los métodos cuantitativos. Esto, sin embargo, lo visualiza más como una fortaleza que como una debilidad.
A juicio del profesor ello llama la atención “sobre todo con la escasa o nula reacción que ha generado la crisis de 2008 en la enseñanza de Economía en el Reino Unido. Si bien el origen de la crisis se puede atribuir en cierta medida al uso excesivo o inadecuado del formalismo matemático en la economía financiera, aparentemente la fe en estos métodos sigue inquebrantable”. Aclaró que “lo que podría haber sido una oportunidad para acercar ambas disciplinas fue ‘desaprovechada’”.
Menciono que esta distancia se percibe mejor, en la opinión de los expertos entrevistados, en la tendencia dentro de la Historia Económica de adoptar un enfoque siempre más casuístico (en vez de investigar una política económica específica, se indagan sus efectos sobre un sector específico en un localidad específica). Estas peyorativamente llamadas ‘pétites histoires’ distan mucho de la cosmovisión positivista de la Economía.
En la investigación sobre América Latina se destacó, primero, la necesidad de recalcar la importancia de esta región tanto dentro de las sociedades más desarrolladas (específicamente en el Reino Unido) como en el mundo en general. Segundo, se visualizó la tendencia a construir equipos multidisciplinarios de investigación en el área de estudios latinoamericanos.
Lo anterior permitió reforzar la importancia que tiene el entregar a los estudiantes de Ciencias Sociales, incluyendo la Ciencia Política, la mayor cantidad posible de metodologías en el proceso de enseñanza. “El pragmatismo metodológico, donde se acomodan las metodologías en función de las problemáticas y no al revés, es un recurso valioso que se inscribe en la tendencia observada, la que, por lo demás, hace total sentido con la naturaleza compleja de los fenómenos que las Ciencias Sociales investigan” declaró el profesor Dingemans.
Concluyó el académico que “en vez de aprender a dominar una sola metodología, la enseñanza debiera apuntar a entregar las herramientas para que el alumno sepa escoger la más apropiada para cada problemática en particular. Esto significa que, para el caso de una disciplina como la Ciencia Política, la que –al menos en Chile– se suele asociar con los métodos cualitativos, los métodos cuantitativos debieran ser una de las tantas herramientas metodológicas con la que trabaja un alumno (y futuro profesional) y no solo un anexo, limitado al marco de unas pocas asignaturas”.