Lunes 13 de Mayo de 2019
Actividad que se constituyó por un recorrido en diversas zonas de la Región de Los Lagos, por un equipo de académicos y estudiantes universitarios.
Una experiencia que “sirvió mucho para enfrentarse a un mundo científico en acción, además de compartir con geólogos, geofísicos y biólogos, como lo hacen los profesionales” fue lo que vivió el estudiante centralino, de acuerdo a lo relatado en retrospectiva por el director de la carrera y quien lo guio en este viaje de exploración académica en terreno.
Fuentes, comentó también acerca de la relevancia de ir a terreno porque “se está trabajando en entender cómo una de las más grandes fallas de Chile, la falla Liquiñe-Ofqui, ha controlado los movimientos de corteza desde hace muchos millones de años hasta la actualidad. Además, se está estudiando cómo se puede relacionar la vida con ambientes geológicos en sectores extremos; la vida que habita en estos sectores es principalmente bacterial, que se conocen como extremófilos”. En ese contexto, el académico centralino explicó que “este último estudio está enmarcado en un área científica de frontera llamada Geomicrobiología”.
Entre los lugares que fueron visitados durante esta práctica experimental, están las zonas de Caleta Puelche y Hornopirén y localidades aledañas al volcán Villarrica.
Durante la primera jornada, se revisaron lugares para colocar equipos de geofísica para mediciones futuras de estructura de la corteza en la zona, siendo principal materia de estudio la zona de falla Liquiñe-Ofqui; los otros dos días, se sacaron muestras de hielo y roca del glaciar Pichillancahue, ubicado en el Parque Nacional Villarrica. También se tomaron muestras de agua y roca de las Termas el Rincón, a los pies de los volcanes Villarrica y Quetrupillán en el camino que une a Coñaripe con la ladera sur del mencionado Parque Nacional.