Viernes 10 de Enero de 2025
En un emotivo encuentro, el programa Prufodis de la Facultad de Educación, celebró el cierre de año académico, reconociendo el compromiso de las empresas que abrieron sus puertas para las prácticas de aprendizaje de sus estudiantes y el reconocimiento a sus estudiantes y familiares.
El 20 de diciembre pasado, en el Auditorio Carlos Blin Arrigada, se llevó a cabo esta ceremonia de cierre de año, cargada de simbolismo y reconocimiento para sus estudiantes y empresas.
El Programa de Formación Sociolaboral para Personas con Discapacidad Intelectual y del Desarrollo (Prufodis), que el 2024 celebró 18 años de trabajo ininterrumpido por la inclusión, promuve no solo la inserción laboral de personas en situación de discapacidad intelectual, sino también su plena integración en el contexto universitario.
Al inicio de la ceremonia, la Secretaria Académica de la Facultad de Educación, Sabrina Devia, entregó las palabras de bienvenida, subrayando la relevancia que tiene Prufodis dentro de la institución: "Prufodis, para esta facultad en particular, no es cualquier programa. Es una unidad académica que busca la inserción social y laboral de sus hijos(as) y nuestros estudiantes. Cada año recibimos a cada cohorte con alegría, pero también con el gran desafío que aquello implica".
Tras ello, se reconoció especialmente a las empresas que permitieron que los estudiantes realizaran sus prácticas de aprendizaje, destacadas no solo por brindar un espacio físico, sino por entregar herramientas laborales y apoyo emocional que marcan la vida de los jóvenes que participan.
Bechtel, representado por Paulina del Río Reyes y Andrea Gutiérrez Prado; la Cafetería Ayún de la Universidad Central, representada por Pilar Márquez; y el laboratorio farmacéutico Ferrer, representado por Paula Araneda, recibieron diplomas en reconocimiento a su compromiso y contribución en el desarrollo de habilidades para personas en situación de discapacidad.
Carolina Becerra por su parte, coordinadora del programa Prufodis, también dirigió unas palabras en las que agradeció a los docentes, familiares y estudiantes por su compromiso constante en la creación de un espacio inclusivo: "Hoy no solo celebramos el cierre de un año académico, sino también el inicio de un nuevo camino. Cada logro alcanzado aquí nos recuerda que la inclusión no es un destino, sino un proceso constante que requiere esfuerzo y la voluntad de todos. Pero también es un derecho".
Para cerrar, Becerra invitó a los presentes a seguir trabajando juntos por un mundo más justo e inclusivo: "Sigamos trabajando juntos, porque un mundo más justo e inclusivo es posible. Gracias a todos por ser parte de este hermoso viaje".