Jueves 29 de Junio de 2023
A propósito de los magros resultados en la última prueba de Matemática del SIMCE, la directora se refirió a algunas medidas que podrían ayudar a cambiar la valoración hacia la disciplina.
Los resultados del SIMCE y en particular la fuerte baja en los aprendizajes de alumnos de cuarto básico y segundo medio, en la prueba de Matemáticas, revela una necesidad que docentes y expertos hemos ido señalando respecto de la importancia de la implementación de clases presenciales en niños, niñas y jóvenes.
En este sentido, los planes y programas propuestos en el curriculum de matemática, requieren de un cuerpo docente capacitado en la resolución de problemas, desarrollo de TICs, argumentación, representación y modelación.
De las propuestas de mitigación presentadas por el ministro Ávila, se encuentra la capacitación docente en estrategias de enseñanza que propicien aprendizajes significativos en sus alumnos. No obstante, esta medida no será suficiente si no se considera la autoestima de los estudiantes que presentan frente a la disciplina, ya que los resultados del SIMCE muestran una vez más, la disminución del porcentaje de estudiantes que se siente capaz de aprender Matemáticas.
Para ello, es importante que el plan de reactivación esté focalizado en desarrollar actividades que involucren una gradualidad en el nivel de dificultad en ejercicios, desarrollar actividades que promuevan el pensamiento lógico; integrando otras disciplinas y actividades aplicadas a los alumnos que les permita ver las matemáticas como una disciplina útil y necesaria para sus vidas.
No existe una receta única, pero si sabemos que las actividades tienen que estar apoyadas por la comunidad escolar en su conjunto, especialmente por apoderados para no sobrecargar a estudiantes y docentes con actividades extracurriculares que sólo generan cansancio y animadversión hacia las matemáticas. Son pequeños cambios que podemos hacer desde el aula.
Para que el plan de reactivación tenga éxito, sólo será posible si cada uno de los participantes de la comunidad escolar y el ministerio trabajan de manera cooperativa y coordinada en pos de mejorar significativamente el aprendizaje matemático.