“Acompañamiento pedagógico a estudiantes, padres y apoderados en tiempos de pandemia” fue el título de la presentación que realizaron las profesoras Dina Gutiérrez y Elena Araya en el seminario online de Formación Inicial Docente, organizado por el centro investigativo del Ministerio de Educación.
El pasado 7 de abril, la carrera de Pedagogía en Educación General Básica en representación de FECS, presentó sus experiencias de prácticas online, destacando entre ellas, lo realizado por las estudiantes Ashly Rojas, Macarena Rosas y Constanza Daroch, todas de 4to año de la carrera, quienes tuvieron que adaptar su práctica pedagógica a un entorno virtual, exigiendo con ello, varias horas de trabajo en equipo dedicado a la búsqueda de escenarios de aprendizaje y el uso adecuado de las tecnologías digitales para llevar a cabo la implementación de clases.
Según detallaron, en una primera instancia, fueron cerca de 10 alumnos de 1° año Básico del Colegio subvencionado Emprender (Temuco) quienes participaron de un cuestionario de preguntas abiertas para recabar información referida a su desarrollo socioemocional y cognitivo, organización de las clases, rutinas, actividades de aprendizaje, entre otras dimensiones.
Una segunda etapa, consideró el acompañamiento de clases por un período de tres meses, oportunidad en la que se analizaron situaciones de aprendizajes con el propósito de diversificar la enseñanza a la luz de los desempeños académicos y emocionales que presentaban. La última etapa, realizada en noviembre, fue la implementación de clases en el área de lenguaje, con una activa participación de estudiantes, padres y apoderados del curso.
Respecto del objetivo de acompañamiento, la profesora Araya comentó “quisimos vincular la teoría del curso didáctica de lectura, escritura y oralidad de la Universidad con la implementación de actividades de aprendizaje sincrónicas y secuenciadas desde un enfoque multimodal y funcional del lenguaje, aportando de esta manera a la continuidad del proceso educativo”.
Para ello, según explicaron las profesoras, se optó por trabajar tres géneros textuales; el poema, la leyenda y la receta. Cada intervención presentó el contenido disciplinar con variadas estrategias didácticas ofreciendo a los estudiantes oportunidades para establecer conexiones entre el texto y sus experiencias personales, emitir opiniones, leer en voz alta y producir por escrito textos breves que daban cuenta de sus sentimientos.
Finalmente, la experiencia que fue valorada por la comunidad y rescatada para el portafolio FID, evidencia de buena forma los aprendizajes y preparación de estudiantes de la carrera para adaptarse y enfrentar los desafíos de la educación en tiempos de pandemia.