La integrante del Instituto de Investigación y Postgrado conversó con El Mercurio sobre los datos que entregó la medición sobre pobreza.
En artículo publicado por el diario "El Mercurio", Gabriela Zapata, integrante del Instituto de Investigación y Postgrado de la Facultad de Economía, Gobierno y Comunicaciones, y miembro del Grupo Max Planck-UCentral, analizó los principales resultados que entregó la Encuesta Casen 2022.
Según el instrumento de medición de la pobreza, los niños y adolescentes son el grupo más afectado por el fenómeno socioeconómico. Aunque mostró una caída en el índice en comparación a la edición previa, de un 10%, autoridades y especialistas conciden en que la reducción vino de la mano de la entrega de subsidios y otros apoyos estatales. Según la encuesta, más de un tercio de la población en pobreza es menor de edad: 568 mil niños y adolescentes. Se trata de un grupo especialmente vulnerable que no cuenta, por ejemplo, con la pensión de las personas mayores o subsidios de empleo.
Para Gabriela Zapata, la clave está en los bajos salarios y trabajo informal, además de la "falta de acceso de las familias a la educación de calidad, alimentación adecuada y vivienda digna", indicadores con mayor incidencia dentro de la pobreza multidimensional.
Plantea que las cifras "nos ponen en alerta porque esas son las áreas en que deberíamos preocuparnos para que los niños sean menos afectados". Añade que las familias son desincentivadas por el costo de oportunidad que implica: "Si vas a salir a trabajar y te van a pagar tan poco, piensan 'mejor me quedo en la casa cuidando a los niños'. Es un círculo vicioso".