Viernes 24 de Enero de 2020
En directo y desde los estudios de televisión de la Universidad Central, estudiantes de tercer año de Periodismo vivieron la emocionante experiencia de despachar en vivo para un medio de comunicación, demostrando en la práctica los conocimientos, técnicas y herramientas aprendidas en la asignatura de Periodismo Televisivo 1, a cargo del periodista y profesor Adolfo Sommer.
El desafío no era fácil: manejar los datos de una noticia solo 20 minutos antes de hacer un despacho en vivo, desde los estudios de televisión de la Universidad, y en directo para el portal Elciudadano.cl poniendo a prueba los nervios, la concentración y exponiéndose a la audiencia.
“Me interesaba que los alumnos, que si bien a lo largo del semestre habían tenido la posibilidad de estar en un estudio de televisión, tuvieran la experiencia de que 10 mil ó 15 mil personas pudieran ver en tiempo real lo que ellos estaban haciendo e interactuar con esas personas, que es lo que pasa hoy en las multiplataformas”, explica Sommer.
En ese contexto los estudiantes tuvieron que demostrar sus habilidades en materia de concentración, improvisación, capacidad analítica y manejo informativo; y superar el miedo a la cámara. Para el docente, estas son herramientas fundamentales para un buen despacho en vivo. “Pasa que uno en cámara puede tener un bloqueo, una traba, o un olvido, pero es el contexto y la capacidad de improvisación, quizás como un híbrido, lo que va a permitir sortear bien la dificultad del despacho”, explica.
Y todo ello debieron poner a prueba los estudiantes. Matías Rosales, uno de los que superó el reto, señala que “lo más difícil, sin duda fue agarrar confianza con la cámara, que es primordial al momento de entregar una noticia para la televisión…uno se preocupa mucho de la opinión del resto y descuida la seguridad en uno mismo y se pone nervioso”.
Por su parte, Fernanda Schell, quien también vivió la experiencia, destaca el sentido real del ejercicio propuesto por el profesor y su valor para su proyección profesional. “Me gustó que al principio nos pusiera una cámara al frente y nos pidiera un despacho inmediato, porque eso también es enfrentarse a la realidad. En cualquier momento, en cualquier medio, incluso haciendo la práctica, nos pueden pedir repentinamente un despacho y hay que estar preparado y alerta”, apunta.
Para Thiara Julio, en tanto, “fue un desafío que nos sirvió mucho para sacar nuestra personalidad y para ir formándonos, para ir viendo qué nos gusta y si de verdad nuestro camino es el periodismo televisivo”. Mientras que otra de las futuras periodistas centralinas, Javiera Pérez, rescata la confianza en sí misma que ganó después de haber hecho su primer despacho: “Siempre pensé que la tele no era lo mío, y sigo con la duda, pero ahora voy con más confianza y con menos miedo a enfrentar la cámara”.