Sebastián Navarrete: emprendiendo con las manos en la masa

Desde chico, Sebastián Navarrete se sintió atraído por la cocina, especialmente por el mundo de las pizzas. No era raro verlo en fiestas familiares ofreciéndose para amasar y hornear, pero la receta de su preparación profesional contemplaba otros ingredientes, como por ejemplo, estudiar Ingeniería Comercial en la Universidad Central. A seis años de haber egresado, y tras su paso por distintas empresas, hoy tiene su propio negocio: “Pizzas La Definitiva”.

“Elegí la Central porque sabía que era una universidad con prestigio y trayectoria… A los meses de estar titulado ingresé al cargo de administrador en una clínica psiquiátrica de la zona oriente, donde estuve alrededor de tres años. Luego estuve un año con un emprendimiento de venta de paquetería. En 2018 ingrese como ejecutivo de riesgo crediticio en Productos Fernández (PF) hasta agosto de 2020 y en septiembre del mismo año partí con mi emprendimiento de pizzería hasta la actualidad”, comenta.

"Cuando decidí que iba a emprender, ahí comenzó uno de mis momentos más desafiantes y eso es día a día, ya que esto no acaba porque es un desafío diario y constante".

Y es que de la mano de su profesión como ingeniero comercial, fue desarrollando su habilidad en la cocina, tomó cursos de panadería, donde aprendió diversas recetas de pan, pastelería y masas para pizzas. “Comencé un largo camino de pruebas y ensayos para llegar a una receta de masa de buena calidad, con los estándares que yo quería lograr y a la vez siguiendo lo que fui aprendiendo”, dice Sebastián, quien comparte sociedad con su primo y juntos piensan en los ingredientes y las variedades de pizzas con las que deleitan a sus clientes.

“Nuestro rubro es muy desafiante, ya que hay mucha competencia y eso genera presión que a veces no es fácil de llevar, por eso uno tiene que ser astuto y rápido para poder sortear esos desafíos. Cuando decidí que iba a emprender, ahí comenzó uno de mis momentos más desafiantes y eso es día a día, ya que esto no acaba porque es un desafío diario y constante”, añade.

"Creo que los conocimientos en gestión de negocios, de administración, el cómo potenciar mi emprendimiento desde una marca con un nombre que ´suene´, que sea visible y atractivo para los demás han sido primordiales para potenciar la pizzería".

Sebastián reconoce en su paso por la Universidad Central, la formación y las competencias entregadas que le han servido para sacar adelante su proyecto. “Creo que los conocimientos en gestión de negocios, el cómo potenciar mi emprendimiento desde una marca con un nombre que ´suene´, que sea visible y atractivo para los demás han sido primordiales para potenciar la pizzería. No puedo dejar de mencionar también la administración; es fundamental mantener un negocio ordenado, saber lo que gastas y finalmente cuáles son las ganancias que vas generando: esa es la clave para saber si el negocio es rentable y que puedas vivir de él”, sostiene.

Y tal parece que la receta funciona, porque para Sebastián, su principal logro profesional es “lo que estoy haciendo actualmente, creando mi propio emprendimiento; y a nivel personal considero que con el tiempo uno va creciendo y estableciendo prioridades y metas que quizás cuando uno es más joven, ni siquiera se las plantea”.

En términos de aprendizaje personal, destaca que lo más importantes ha sido la constancia en el trabajo, “el tener la fe y la confianza de que esto va a funcionar, que puedo crear un producto que se vende y que, además, con el tiempo se vuelve rentable”.

Finalmente, Sebastián le da un valor muy importante a la paciencia: “Emprender no es un camino fácil y los logros no se ven rápidamente, es algo lento, pero si le pones garra y compromiso, ganas clientes, vendes y ganas, lo cual hace que esto sea interesante y te motiva a buscar cada vez más opciones para que esto vaya creciendo día a día”.