El objetivo de la actividad era abordar el lenguaje inclusivo de género, para identificar qué se entiende por éste y cómo se aplica en la vida cotidiana de los y las estudiantes.
La Universidad Central y el Tecnológico de Monterrey de México realizaron ‘Mesas de diálogo’, iniciativa que se enmarca en el programa TEC-UCEN Sin Fronteras y que se desarrolló a través de plataforma online. Esta actividad fue organizada por el Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana del TEC de Monterrey, en conjunto con la Unidad de Género y Diversidad (UGD) y Relaciones Internacionales, ambas de la UCEN.
El espacio estuvo orientado a estudiantes de ambas universidades, siendo moderada por funcionarios/as (docentes y directivos/as de carrera,) de ambas casas de estudio, que se capacitaron previamente para facilitar el diálogo entre los y las participantes. A su vez, estuvieron presentes observadoras de la UGD, a fin de conocer y aprender de la experiencia, para generar insumos para fortalecer las políticas, protocolos, y acciones institucionales, según las percepciones y necesidades de quienes participaron.
Las ‘Mesas de Diálogo’ fueron un espacio de conversación donde se abordó el lenguaje inclusivo de género, de manera de poder identificar qué se entiende por éste y cómo se aplica en la vida cotidiana, a fin de deconstruir los significados asociados a ésta temática, a través de la reflexión y compartir distintas experiencias.
La jornada se inició con la bienvenida a todas las personas, dando las primeras palabras Perla Salinas, perteneciente al Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana, quien explicó el formato de las ‘Mesas de Diálogo’, destacando que “la importancia del diálogo, en tanto se reconoce a un otro/a, en un espacio protegido, de confianza y seguro, aportando ampliar las distintas perspectivas”.
Posteriormente Priscilla Carrasco, Jefa de la Unidad de Género y Diversidad de la Universidad Central, quien también estuvo en la apertura destacó que “es un tema controversial, donde hay perspectivas diferentes, y posibilitando el diálogo es posible generar una cultura diferente e indicó la necesidad de abordar de manera colaborativa estos temas, en tanto son importantes en nuestra sociedad y necesarios para hacer un cambio”.
Luego se dio inicio a las ‘Mesas de Diálogo’, las cuales estuvieron compuestas por dos moderadores/as y estudiantes de ambas universidades. Los y las estudiantes apuntaron a que el lenguaje inclusivo no solo incluía el género femenino y masculino, si no que a la inclusión de todas las personas. Por otra parte, comentaron que les dificultaba internalizarlo por el cuidado que éste requería y desconocimiento de la temática, ya que no emergía de manera automática, sino que era racionalizado, a fin de no causar un daño en otras personas. También se compartieron experiencias respecto a la discriminación y dieron cuenta de que hoy en día había mayor consciencia e interés en utilizar este lenguaje y reconocer su importancia.
En el cierre, estudiantes compartieron sus impresiones de la actividad donde se reconoció el respeto y la validación de las ideas, lo que posibilitó generar un clima respetuoso. También se consideró una experiencia enriquecedora, que permitió reconocer la diversidad y las diferencias, donde la comunicación y el diálogo fueron fundamentales, quedando como desafío y compromiso seguir participando de estas instancias, junto con respetar e invitar a otras personas a ser parte de este cambio.