Martes 24 de Noviembre de 2020
La instancia fue un espacio online creado para reunirse a compartir experiencias, estrategias para un mejor autoconocimiento, salud física y emocional.
La décima Semana Saludable UCEN, organizada por la Dirección de Apoyo y Vida Estudiantil (DAVE) y realizada desde el 9 al 13 de noviembre en modalidad online, ofreció una serie de actividades deportivas (G.A.P., Entrenamiento Funcional, Escalada, Aerobox y Judo), de relajación (Meditación y Yoga), instancias para hablar sobre salud sexual con la Matrona DAVE y de desarrollo a la salud emocional a través de diversos talleres como: ‘Humor y resiliencia’, ‘Cómo lograr un buen dormir’, ‘Crea la vida que quieres’, ‘Una mirada complementaria de la salud’ y ‘Dime lo que comes y te diré lo que sientes’.
Este último taller, contó con el mayor interés y participación de parte de la comunidad centralina. Tuvo como objetivo trabajar la capacidad de reconocer emociones, para con ello comprender cómo la ansiedad y la manera de alimentarnos influye directamente en nuestra autoestima.
Durante la actividad, las y los asistentes manifestaron sentir una constante sensación de ansiedad asociada a la incertidumbre que se ha experimentado durante este año 2020, sumado a no saber cómo organizarse para responder adecuadamente a sus exigencias académicas. Por ello, a través del reconocimiento emocional y el desarrollo de estrategias para su abordaje, se realizó una asociación entre el aumento de la ansiedad y cómo esto incide en la forma de alimentarse, identificando el hambre emocional y el apetito.
“Quienes participaron explicitaron estar consumiendo más azúcar durante este año, lo cual lo asociaron a la ansiedad e incertidumbre, además de la carga académica propia del segundo semestre. Otros mencionaron sentir afectado su apetito en momentos de estrés, abriendo las posibilidades a propender a una alimentación a base de nutrientes o preparaciones que alivien el estómago en momentos de estrés tales como ensaladas o preparaciones en base a verduras, semillas y proteínas”, comentó Constanze Ihl, psicóloga DAVE.
La estudiante de Nutrición, María José Martínez expuso sobre la relevancia de detectar cuándo estamos experimentando hambre emocional o hambre real. En cuanto al hambre emocional se refirió a algunos criterios que permiten reconocerla, tales como las ganas de comer un alimento en particular, tendencia a comer más de lo que se comía o la culpa asociada a la sensación de comer más de lo que se debía. “Una vez que se logra diferenciar porqué se está comiendo, es esencial poner en `práctica las estrategias de manejo de ansiedad como ejercicios de relajación y activación física para lograr disminuir la sensación”, comentó.
Por último, se hizo especial hincapié en la importancia de trabajar en la autoestima y valoración personales. Uno de los elementos centrales que se abordó tuvo relación con la percepción del propio físico, lo cual quienes asistieron mencionaron ver afectado al no alimentarse de forma apropiada durante este año debido a la falta de tiempo para realizar preparaciones más sanas, como también por preferir alimentos que satisfagan el hambre emocional. Las y los participantes revelaron la importancia de sentirse bien con una(a) mismo(a), sin que cobre valor la opinión externa y además, reconocer los avances propios alcanzados y evitar la comparación con otras personas. Todo esto teniendo presente que no somos nuestro peso y que no existe una única forma de belleza, comprendiendo que está bien ser como uno(a) es.
Si participaste en esta o alguna de las actividades de la Semana Saludable, cuéntanos qué te parecieron AQUÍ