Jueves 29 de Enero de 2015
La iniciativa ‘Sembrando Futuros’ fue ejecutada estudiantes de la carrera de Terapia Ocupacional y fue apoyada por el programa de ‘Incubadora de Proyectos Sociales’.
Un exitoso cierre tuvo la iniciativa ‘Sembrando Futuros’, realizada por cinco estudiantes de la carrera de Terapia Ocupacional, a través de la Incubadora de Proyectos Sociales del Programa de Desarrollo Social de la Vicerrectoría Académica.
La actividad se llevó a cabo en la corporación Padre Patricio Espinosa, de la comuna de El Monte y el objetivo del proyecto era generar una mejor calidad de vida de los habitantes de la comuna, a través de la generación de taller de rehabilitación laboral para lograr optimizar el equilibrio en las áreas de desempeño ocupacional, habilitando y rehabilitando actividades y habilidades.
12 mujeres de la localidad participaron de la iniciativa, lo que les permitió desarrollarse en habilitación laboral, adquiriendo mejores herramientas socio-laborales, participar de una capacitación en peluquería. Además, la iniciativa contó con el apoyo de la docente de Terapia Ocupacional Claudia Pezoa.
Maritza Carrasco, coordinadora (s) del Programa de Desarrollo Social aseguró que “este proyecto tuvo múltiples complejidades, entre otras la comunicación por la distancia y la dificultad en el acceso a mails o los tiempos de traslado, sin embargo éstas se pudieron superar tanto por la persistencia, compromiso y motivación de las estudiantes como por la buena disposición, el anhelo de desarrollarse de las mujeres participantes y mejorar su calidad de vida”.
La responsable del equipo ejecutor, Alexa Molina manifestó que “no es fácil redactar, planificar, idear y llevar a cabo un proyecto. Inviertes tiempo, recursos, energías, pero es un proceso enriquecedor. Es un aprendizaje como experiencia de vida, y el ver la alegría y el agradecimiento de las personas es algo impagable”.
“Los resultados obtenidos nos dejaron totalmente satisfechas, porque que se logró lo comprometido con el grupo de El Monte, asimismo en lo que refiere a las alumnas, vivenciaron un proceso formativo, llevando a cabo un proyectos desde el diagnóstico hasta la implementación, rindiendo fondos, administrando los recursos humanos y materiales con que contaban, además de resolver las problemáticas surgidas lo que implicó que movilizaran un montón de recursos para lograr su propósito”, agregó Carrasco.