A pesar de disponer de evidencia empírica, la valoración del entorno institucional o del peso y la voluntad de los actores estratégicos se queda solo en el discurso de la voluntad declarada y menos en la consideración efectiva de una voluntad real que permita dimensionar estas dos cuestiones.
Al riesgo de no analizar debidamente los supuestos se suma una escaza valoración del entorno institucional. La viabilidad política es una condición que delimita la interacción de los actores en la producción de determinados resultados. Ésta, por tanto, funciona como una condición necesaria para la formulación e implementación de las reformas.
¿Cómo está incidiendo el déficit de viabilidad en el lanzamiento las reformas? Hasta ahora observamos que se está configurando un escenario de bloqueo de ambas iniciativas. Solo existirán condiciones favorables para ambas reformas si no existe un elevado nivel de fragmentación política y si los actores estratégicos perciben un beneficio en el desarrollo de éstas. Pero, hasta ahora, pareciera que ambos requisitos no se están cumpliendo.