Martes 30 de Diciembre de 2014
Desde diciembre de 2013 y hasta julio de este año, dirigentes sociales de distintas agrupaciones de la comuna de Maipú y funcionarios municipales de participaron en este programa pionero de formación académica para entregarles más y mejores herramientas para desempeñar su labor en sus organizaciones
147 dirigentes sociales de la comuna y 27 funcionarios municipales, que participaron en el “Diplomado en Participación Ciudadana y Gestión Municipal para el Desarrollo Local” y del “Diplomado en Gestión Municipal para la Participación y el Desarrollo Local”, recibieron su certificación de manos del alcalde y de académicos de la Facultad de Ciencias políticas y Administración Pública de la Universidad Central de Chile, tras un semestre de clases.
La ceremonia marcó el término de la primera Escuela de Dirigentes Sociales de Maipú, experiencia que tuvo como finalidad entregar herramientas de educación formal a los líderes sociales de distintos barrios de la comuna. Además, se buscó la inclusión de algunos funcionarios municipales que cumplen un rol fundamental como nexo de participación ciudadana entre el municipio y la comunidad.
En la ocasión, el alcalde Christian Vittori destacó el esfuerzo de todos los participantes en esta iniciativa y resaltó el logro personal que implica llegar a esta etapa de término de sus estudios. “Esta fue una instancia de crecimiento personal para el desarrollo de su actividad como dirigentes sociales. Algunos querían tener la vivencia de estar en un aula después de años, con todos los temores que la materialización de este sueño significó…pero ahora viene lo más importante que es aplicar las herramientas que aquí han recibido para desarrollar una mejor labor para sus comunidades y en colaboración con el municipio”, manifestó.
Por su parte, el director de los diplomados y de la Escuela de Administración Pública de la U. Central, profesor Rafael Pizarro, pidió a los egresados un favor especial: “no olviden lo que aprendieron en las aulas, no olviden que el lenguaje genera realidad y que por lo tanto la forma en que ustedes comunican es trascendental para el éxito de su organización. Recuerden que es relevante ponerse en el lugar del otro, que es importante poder comunicar, que todas las cosas son producto de la planificación y que el diálogo no es debilidad en el desarrollo del liderazgo sino que es una fortaleza”.
En representación de los dirigentes graduados, la encargada de expresar unas palabras fue María Isabel Sotomayor, quien fue la alumna de más edad del curso, con 86 años. “Quiero agradecer en nombre de todos los alumnos porque nos dieron esta gran oportunidad, a los que ya sabían muchas cosas, pudieron reafirmar sus ideales, y a los que llegamos a aprender, aprovechamos todo lo que nos enseñaron los profesores. Estoy orgullosa porque fui elegida como la mayor de todas las alumnas con mis 86… casi 87 años para decir estas palabras. Les agradezco a los profesores por soportar todas mis intervenciones, a veces equivocadas, a veces buenas, pero aprendí mucho y quiero que todo eso nos quede a todos los que participamos en este diplomado”, indicó.
En nombre de los funcionarios que participaron de esta experiencia, la encargada de Organizaciones Comunitarias, Elena Painepan, agradeció el haber podido recibir este curso que le entregó herramientas para el mejor desarrollo de su labor en pro de la participación ciudadana. “Estamos muy contentos y agradecidos quienes trabajamos para esta gestión municipal. Lo hacemos desde nuestra convicción de que la inclusión y la participación de los vecinos y vecinas de Maipú, representada por sus dirigentes sociales, son la clave para avanzar hacia una comuna más feliz y con igualdad de oportunidades para todos y para todas”, indicó.
Finalmente, el decano de la facultad, profesor Marco Moreno, agradeció al municipio por haberlos seleccionado para llevar a cabo este proyecto y habló de los alcances de esta experiencia. “Con gusto hemos podido comprobar que ustedes se han apropiado de sus conocimientos y eso es lo que realmente tiene sentido. Al final del día uno valora si esto ha servido para algo si efectivamente se produce un cambio en la manera en la que actúo, en que cambio la forma en la que desarrollo una actividad, en cómo enfrento nuevos desafíos. Creemos que esto ha sido un aporte y una contribución”, concluyó.